Desde Acción Solidaria queremos terminar el Mes del Orgullo rechazando la discriminación que sufren, diariamente, las personas gais, lesbianas, bisexuales, trans, intersex y queer. Durante la segunda semana de junio, en menos de 24 horas, fueron asesinadas tres personas sexodiversas en Caracas. Y el 1° de julio se difundió la noticia del homicidio de una pareja de lesbianas en el estado Aragua que, aparentemente, cumple con las características de un crimen de odio.
Aunque no hay registros recientes ni oficiales, Unión Afirmativa asegura que en 2017 Venezuela se ubicaba en el cuarto lugar de países donde más se asesinaba a personas transgénero y que, hasta 2020, se contaban 14 víctimas en el país. Pero, además de la falta de visibilización en los medios de comunicación y los prejuicios a los que se enfrentan las comunidades LGBTIQ+, son los discursos de odio de parte de la sociedad los que perpetúan las violencias.
La violencia estructural, que viene principalmente de parte del Estado, compromete las vidas de estas comunidades declaradas vulnerables. Pero desde la colectividad de la sociedad civil se deben desmontar los estigmas que rodean a las personas de la diversidad sexual, solo así podemos crear y garantizar espacios seguros para todos y todas; promover una educación sexual integral desde las infancias; exigir los derechos de todas las personas a formar la familia que quieran y cuando quieran; incluir a todas las identidades en entornos laborales y de aprendizaje y, sobre todo, promover la empatía y el respeto en todas partes.