Admitir que existe una crisis humanitaria en Venezuela, permitirá que se realicen las gestiones necesarias para que la comunidad internacional ayude a los más vulnerables. De acuerdo con Feliciano Reyna, presidente de la Asociación Civil Acción Solidaria, el Ejecutivo Nacional debe velar por buscar una solución eficaz a los problemas de los venezolanos.
El activista señaló en entrevista a VPI TV que los grupos organizados, fundaciones e iniciativas caritativas se han incrementado en los últimos meses para ayudar a las personas que no tienen acceso a alimentos o medicamentos, y se han convertido en la población más vulnerable.
“Conocemos de grupos organizados en 25 ciudades de 13 países que envían medicinas para donaciones directas, que nos han permitido hacer donaciones unas 20 mil veces”, indicó quien fue galardonado con el Premio de Derechos Humanos de la Embajada de Canadá en 2010 y ha sumado a 14 organizaciones en una alianza base con Acción Solidaria los últimos tiempos.
“Cuando uno se pone a ver, ha aparecido, en medio de todo esto, lo mejor de las personas aquí y en el exterior, es constante. Esta ayuda hace la diferencia y le cambia la vida a esa persona a la que llega”.
Sin embargo, mientras no se acepte que existe una crisis humanitaria, no se harán las gestiones necesarias para solventar la situación, opinó.
“En este momento existe una mala gestión administrativa, no se responden a tiempo a las necesidades, y lo peor es no aceptar que hay una crisis humanitaria”.
Reyna explicó que la ex canciller de Venezuela, ahora presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Delcy Rodríguez “ha declarado dos veces que no hay crisis humanitaria, y eso es grave, porque saben (el gobierno) que la hay y no se movilizan para solventar la situación”.
La crisis ha afectado incluso a unas 75 mil personas con VIH que no han recibido sus antiretrovirales, ni otros medicamentos, según datos de Reyna.
Los estudios de distintas ONG son una sentencia de muerte. La organización Human Rights Watch indicó, en su reporte de abril, que Venezuela vive una crisis humanitaria que ha llevado a una migración sin precedentes, de miles de personas que buscan refugio, alimentos, trabajo temporal o asistencia médica en otros países.
Incluso, la desnutrición infantil ha alcanzado al 11,4% de los niños venezolanos, según Caritas; o 30% de 9 millones de infantes en el país según cifras de Convite AC, recogidas por Transparencia Venezuela, en su boletín de mayo.
Esta última publicación también apunta a una emergencia compleja que además del empeoramiento de los sectores de alimentación y salud, incluye el aumento de la pobreza y la desigualdad social, del éxodo o diáspora, el incremento de la economía informal y la situación de conflicto e inseguridad.
Mientras que la pobreza alcanzó al 81,8% de los hogares (Encovi 2016), y el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social señaló que en 2016 la fuerza laboral estuvo integrada por 13 millones de trabajadores, de los que 5.273.343 ya formaban parte de la economía informal.
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Fuente: VPI TV / Patrizia Aymerich