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El presidente de Acción Solidaria reiteró que se requiere la inversión internacional para el bienestar de la población y que se pueda atender sus necesidades humanas

Feliciano Reyna, presidente de Acción Solidaria, presentó un balance sobre la situación humanitaria en Venezuela y resaltó que, para finales octubre de 2024, solo el 17 % de los fondos requeridos para el Plan de Respuesta Humanitaria han llegado al país. Esto indica que 2024 podría ser el año con menor cooperación internacional humanitaria recibida hasta la fecha, desde que comenzó su implementación en 2019.

«Estamos en octubre y, siendo optimista, para finales de este año esta cifra podría aumentar hasta un 30 % o 35 % de lo que se necesita. Sin embargo, aún se requiere mucho más. La Organización de las Naciones Unidas estima que se necesita asistir a 5.1 millones de personas, pero, según el análisis que hemos realizado las organizaciones de la sociedad civil, al menos 20 millones de personas están en situación de vulnerabilidad», dijo Reyna en entrevista para Gabriela Perozo. 

El presidente de la organización destacó que muchas personas en situación de necesidad de asistencia han agotado sus medios de vida en un intento por mejorar su calidad de vida, lo que las ha llevado a no tener opciones para complementar sus ingresos. Reyna afirmó que, debido a estas circunstancias, se requieren esfuerzos y recursos adicionales para mitigar el sufrimiento de quienes enfrentan la Emergencia Humanitaria Compleja.

De igual forma, destacó cómo las sanciones sectoriales inciden en el retraso del envío de recursos destinados a la ayuda humanitaria. Reyna explicó que el envío de apoyo termina siendo condicionado por las trabas legales que afectan la imposición de estas medidas, lo que dificulta el acceso a los fondos necesarios para atender la crisis.

«Cuando intentamos apoyar a un hospital público de atención materno-infantil trayendo equipos, pasaron más de tres meses para llevar equipos a la unidad de cuidados intensivos. Esto ocurrió porque la empresa proveedora estaba verificando que, a pesar de contar con una licencia para asuntos humanitarios, no existiera ningún inconveniente legal», agregó.

En la conversación, Reyna también enfatizó la necesidad de tomar decisiones que prioricen el bienestar de la población y las necesidades humanas, más allá del contexto político. Señaló que las trincheras institucionales impiden alcanzar acuerdos posibles y, como consecuencia, terminan afectando a la población que queda al margen de las soluciones necesarias.

Reyna recordó la importancia de abrir convenios mediante un acompañamiento internacional para facilitar una solución en Venezuela. Mencionó que este tipo de colaboración externa es fundamental para enfrentar la crisis, ya que facilita la implementación de estrategias efectivas, sostenibles y el apoyo necesario para superar los desafíos actuales de la Emergencia Humanitaria Compleja.