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En la actividad se ofreció vacunación, consultas de medicina general y odontología. En total, se beneficiaron a 60 personas que residen en esta zona

Jackelin Díaz Landazábal

Yulimar Ortiz, una joven de 23 años, vive en la comunidad de Bajo Paují en el municipio El Hatillo del estado Miranda. Está embarazada y comenta que la falta de recursos y la dificultad para acceder a la atención médica eran desafíos constantes en su camino. Vivía en una zona rural, donde su centro de salud más cercano le queda a media hora de camino en autobús. 

Ella fue una de las que asistió a una jornada de salud impulsada por la alcaldía de El Hatillo. En ese lugar, Yulimar recibió unas vitaminas que necesitaba con su embarazo avanzando. Ella explicó que no tenía los recursos económicos para comprar los medicamentos por sus propios medios. La crisis la empujó a posponer la compra de sus requerimientos básicos para que su bebé creciera de manera saludable. Para Yulimar, comprar unas vitaminas representa un costo de al menos 30 dólares, una suma que no puede costear no teniendo trabajo. 

Esta realidad también aqueja a Luisa Márquez, de 77 años, que depende de un tercero para poder comprar sus medicinas. En su caso, se trata de sus hijos quienes hacen lo posible para que su mamá tenga acceso al tratamiento por hipertensión. Pero además de eso, Luisa debe tomar un protector gástrico para que la pastilla no le provoque efectos en su estómago. La suma de los costos cada vez va aumentando y ella no tiene para cubrirlo. Los ingresos que entran prefiere distribuirlos en comida, lo más esencial en su casa.

Para Rosa Sánchez, quien debe tomar de por vida la metformina, el sueldo no le alcanza para costear lo que le recetó su doctor por su condición de diabetes. Una cajita de ese medicamento le cuesta mínimo 100 bolívares cuando su sueldo es de 130 bolívares mensuales. Suspira y se despide agradeciendo que, gracias a la jornada de salud, puede destinar ese dinero a comprar algo más. 

La actividad contó con servicio de medicina general, odontología y pediatría, además de una jornada de vacunación. Un equipo de profesionales de la salud se trasladó a Bajo Paují para brindar atención odontológica gratuita y donar medicamentos esenciales a los residentes. Esta iniciativa fue el resultado de la colaboración entre organizaciones no gubernamentales y voluntarios locales comprometidos con el bienestar de la población.

La actividad se llevó a cabo en un entorno natural impresionante, rodeado de montañas y aire puro, pero también en un área donde el acceso a servicios de salud es limitado. La atención odontológica brindada incluyó revisiones generales con el objetivo de mejorar la salud bucal de la comunidad.

Además, se realizó una donación de medicamentos de primera necesidad. Entre los medicamentos donados se incluyeron vitaminas prenatales para apoyar a las mujeres embarazadas, desparasitantes, antibióticos y medicamentos para problemas respiratorios. La importancia de este gesto solidario radica en el acceso limitado de la comunidad a estos productos esenciales.

En total, 60 personas resultaron beneficiadas. Por otra parte, el servicio de pediatría atendió a 12 niños, realizando evaluaciones de salud, control de crecimiento y desarrollo y proporcionando orientación a los padres sobre cuidado infantil. El servicio de odontología atendió a 23 pacientes y el personal de salud en el área de  vacunación benefició a 10 personas de diferentes grupos de edad. Finalmente, se entregaron medicamentos a un total de 46 personas.

La comunidad de Bajo Pauji se mostró agradecida por la visita de estos profesionales de la salud y los voluntarios que hicieron posible esta jornada. La actividad no solo mejoró la salud bucal de los residentes, sino que también proporcionó un alivio significativo al abordar necesidades médicas esenciales.

La actividad es un recordatorio de cómo la solidaridad y la atención a las necesidades de salud básicas pueden marcar la diferencia en las vidas de las personas que viven en áreas rurales y remotas. Esta iniciativa resalta la importancia de continuar brindando apoyo y recursos a estas comunidades para garantizar que tengan acceso a servicios médicos en respeto a su derecho humano a la salud.